Convocatoria abierta a la Residencia Epecuén XVII, programa de arte situado en la provincia de Buenos Aires.
Epecuén es una villa argentina fundada junto a la Laguna Epecuén, famosa por sus aguas saladas con propiedades curativas. En 1985, el lago inundó por completo al pueblo, dejándolo bajo el agua por más de 20 años y dando lugar a un paisaje de ruinas blancas.
Desde 2017 se lleva a cabo ahí la RESIDENCIA EPECUÉN, un programa para artistas, curadores e investigadores con el objetivo de ofrecer un espacio creativo y reflexivo para la producción y el desarrollo de obra en el marco de este territorio.
Este año, la curaduría estará a cargo de Helena Lugo —directora de Terremoto. Su propuesta busca explorar la relación entre la desolación del paisaje y los colapsos de sentido. Las ruinas de la villa de Epecuén no son sólo vestigios, son formas activas de descomposición de mundo: estructuras que se rinden, lenguajes que se agotan, órdenes que se resquebrajan.
La investigación parte de la historia y el olvido para pensar los fines del mundo —no como catástrofe, sino como momentos en que las estructuras se disuelven, pierden o arrebatan, pero que justo por ello abren paso a nuevas formas de imaginar. Precisamente entre la sal, el agua y el colapso, se busca invocar la alomancia —práctica adivinatoria con sal— como gesto poético para activar memorias interrumpidas, proponer otro tipo de sensibilidad(es) y vislumbrar posibles futuros.
Este cruce forma parte de la Beca Ñandú, un programa que busca generar lazos duraderos entre Residencia Epecuén y plataformas internacionales, promoviendo el intercambio artístico y el fortalecimiento de redes entre artistas, curadores y comunidades.
El programa está dirigido a artistas de todas las disciplinas, investigadores y curadores interesados en prácticas situadas.
Convocatoria abierta hasta el 10 de agosto de 2025: